Albert Mangelsdorff | El Jazz que prohibió Hitler
Nuestra clase de Historia Musical comienza en Frankfurt en el año veintiocho del pasado siglo. El partido Nazi acaba de ganar sus primeros 12 escaños en las elecciones generales. Y nace uno de los mejores trombonistas de Jazz del viejo continente: Albert Mangelsdorff. Mangelsdorff creció en la fría Alemanía de los años 30, e influenciado por su hermano mayor comienza a amar el Jazz a la temprana edad de 12 años en un mundo que no estaba hecho para los niños, ni al parecer, para el jazz. La historia de Mangelsdorff, al igual que la de todos los músicos europeos de Jazz de aquella época, está intimamente ligada a la II Guerra Mundial, o más bien a los soldados norteamericanos que participaron en ella. El Hot Jazz de Glen Miller, Louis Amstrong o Duke Ellington amenizaba las fiestas de los soldados americanos y volvía locos a los jóvenes alemanes que habían estado sometidos a los dictámenes censores del régimen nazi. Durante la guerra el Jazz estuvo prohibido por los nazis, ya que esa sensación de libertad de espíritu no estaba en consonancia con los ideales del partido, por lo que la única formación musical que se podía recibir en aquella época en Alemania era el estudio de la música clásica, que Mangelsdorff interpretaba ya desde pequeño con el violín. Al acabar la guerra, Mangelsdorff ya se había inclinado hacia el Jazz y tocaba la guitarra en clubs para soldados americanos con la Otto-Laufner Big Band. Poco después, a la edad de 25 años, queda fascinado por el trombón y decide tomar algunas clases, siendo completamente un novato con cualquier instrumento de viento. A principios de los años 50, sólo un par de años después de empezar a tocar el trombón, ya estaba tocando con distintas bandas y grabando sus primeras canciones. Su estilo se fue acentuando, el Jazz «negro» de Nueva Orleans sólo lo podrían tocar ellos, pero nunca podrían competir con la ‘eficiencia alemana’. Mangelsdorff apadrinó el Free-Jazz, ese hijo bastardo de padres americanos y europeos. Su biografía está repleta de colaboraciones con bandas de jazz de todo tipo, ensembles, quintetos, trios y big bands, y su música ha estado intimamente ligada a la música contemporánea, tomando de ella la inspiración y devolviéndole la improvisación. La experimentación siempre fue un elemento en la música de Mangelsdorff que perfeccionó una peculiar técnica multifónica o disonante, que conseguía al tocar una nota con el trombón mientras cantaba una nota más alta. Así se fue forjando su historia, hasta que Mangelsdorff cruza el charco y les enseña a los padres del Jazz cómo se las gastan en Europa, con una extraordinaria...