Sand Hole – Metal & Stoner Rock desde Madrid
Jul01

Sand Hole – Metal & Stoner Rock desde Madrid

Con una nube de «polvo blanco» y hebillas de metal pesado irrumpe en las instalaciones musiquiátricas la banda madrileña Sand Hole, un cóctel explosivo de ritmos contundentes, melodías agresivas y voces que te suben y bajan del inframundo más oscuro hasta la locura más electrizante. A nosotros nos han hecho vibrar… ¿y a vosotros? Dejadnos vuestra opinión sobre Sand Hole y conoced más de ellos en su celda del...

Leer más
Promoción gratuita de eventos
Ene14

Promoción gratuita de eventos

En el Musiquiátrico no dejamos de luchar por los artistas y los profesionales del mundo de la música. ¿Y qué mejor forma que ayudaros a difundir cada concierto, cada encuentro musical?

Leer más

Eskorbuto, cerebros destruidos por eskizofrenia subversiva

· Analizamos el historial musiquiátrico de una de las bandas más controvertidas de los anales del punk Durante muchos años fueron un nombre tabú dentro de la escena punk. Precisamente, en los años en los que ellos estaban dentro de ese movimiento. El modus operandi que tenían de vivir sus vidas no le hacia demasiada gracia a los que tenían que compartir escenarios con ellos. Y la verdad es que Eskorbuto dieron razones de sobra para intentar mantener las distancias con ellos, pero también hay que reconocerles que son una especie única en la música en castellano. En El Musiquiátrico estudiamos el caso de Eskorbuto. Para comenzar el expediente de estos musicópatas severos hay que remontarse al principio de la década de los 80 del pasado siglo, en la margen izquierda del río Nervión, Bilbao.  Se trata de una zona de alta industrialización que al igual que Inglaterra sufren una gran depresión económica, con una gran pérdida de puestos de trabajo y, sobre todo, de falta de esperanza de la juventud. En la Gran Bretaña nacieron The Clash y Sex Pistols. En España surgieron La Polla Records y Eskorbuto. Iosu, Juanma y Paco.  Ellos formaban Eskorbuto. Los primeros síntomas se comienzan a notar en un pequeño local de ensayo. Las premisas eran muy claras: ‘Hazlo tú mismo’. Sin apenas tener ningún conocimiento de música comienzan la creación de sus primeras canciones, y solo dos años después ya estaban en Madrid moviendo una maqueta que ellos mismos habían grabado. Era el comienzo de un historial incapaz de dejar indiferente a nadie e iba a dejar por el camino muchos ‘Cerebros Destruidos’. Su primera aventura en la capital de España marcó fuertemente a los tres integrantes y fue una experiencia que les hizo ser Eskorbuto. Debido a sus «pintas», la policía los detuvo mientras caminaban por la calle. Al ser registrados le encontraron la copia de su maqueta en la que ya se incluía el ácido tema ‘Mucha Policía, Poca Diversión’. Durante las horas que permanecieron en comisaría nadie relacionado con el independentismo o el llamado Rock Radikal Vasco mostró ningún tipo de interés por su situación. Esto dio pie a la creación de la canción ‘A la mierda el País Vasco’. Por supuesto, pronto supuso un fuerte enfrentamiento contra grupos, seguidores y demás estamentos sociales vascos. Pero eso no es lo único que los separaría de sus «colegas de promoción». Los problemas con las drogas que arrastraban los miembros de Eskorbuto (tanto Iosu como Juanma acabaron falleciendo por su culpa) y la rebeldía de la que siempre hacían gala les llevó a robar en alguna ocasión los instrumentos de los grupos...

Leer más

Las Musicopatías Callejeras de Zaz, Beirut y autónomos anónimos

En esta ocasión el Musiquiátrico se ha introducido en la realidad binaria en busca de epidemias sonoras y musicopatías callejeras. Desde tiempos inmemorables, los espacios públicos, las calles, las plazas de ciudades, incluso en las comunidades rurales, estos escenarios han servido como lugar de expansión y difusión de diversas patologías sonoras. Antaño, fueron Juglares y Trovadores quienes narraban musicalmente en verso hechos, historias y mitos. Hoy, son distintos musicópatas los que siguen utilizando la calle para contagiar y divulgar sus brotes musicóticos, ya sea por obligación o por preferencia. En primer lugar, hablar de una musicópata anónima, pues no existe información del referente. Su relevancia, subyace en la peculiaridad de la técnica empleada para tocar la guitarra. Es como si hubiera adaptado la sonoridad del instrumento a su música tradicional. La manera que tiene de manipular el mástil y los sonidos que obtiene con sus movimientos rotatorios y percutores sobre los trastes, han llevado al Musiquiátrico a diagnosticar estas características como posibles pródromos de  un nistagmo severo, que en altas dosis puede emocionar positivamente ocasionando una eminente sonrisa continuada.   También, existen grandes epidemias sonoras callejeras producidas por musicópatas de renombre internacional, como es el caso de los Estadounidenses Beirut. Una banda liderada por Zach Condon que fusiona música folk del este europeo y mexicana, con pop occidental. Compuesta formalmente por Perrin Cloutier (cello/acordeón), Jason Poranski (guitarra/ukelele/mandolina), Nick Petree (batería/percusión), Kristin Farebee (violín), Paul Colins (órgano/teclados/tambor/ukelele), Jon Natchez (saxo/mandolina/glockenspiel), Kelly Pratt (trompeta/bombardino/glockenspiel) y Zach Condon (voz/trompeta/guitarra), Beirut ha conseguido sorprender a los musiquiatras una vez concluidos los análisis factoriales sonoros, por su alto grado de fusión y creatividad. La utilización de los espacios y elementos urbanos para propagar y contagiar la agitación psicomusical recogida en sus tres discos: “Gulag Orkestar” (2006), “The Flying Club Cup” (2007) y “The Rip Tide» (2011) han convertido a Beirut en un estresante psicosocial sonoro propicio para ser recomendado por el Musiquiátrico en dosis prolongadas como paliativo de ecopraxia eventual. Un caso muy parecido al anterior, es el que ocurre con Zaz, nombre artístico de la francesa Isabelle Geffroy. Esta musicópata ha sabido fusionar como nadie la música francesa, el jazz, el soul y la música acústica, alcanzando niveles de experimentación sonora dignos de ser diagnosticados por el Musiquiátrico. A pesar de debutar en 2010, con su álbum homónimo “Zaz”, la carrera musiquiátrica de Isabelle comenzó hace mucho tiempo, cuando en 1985, con tan sólo 5 años, ingresó en el conservatorio de Tours, su ciudad natal, donde estudió solfeo, violín, piano, canto coral y guitarra. En el año 2000, tras mudarse a Burdeos en 1994, consiguió una beca local para estudiar en el Centro ...

Leer más

Nuevos discos de Gérmenes y Segismundo Toxicómano | Las dos caras de la moneda

En las últimas semanas han salido al mercado los nuevos trabajos de dos de los grupos que a más musicópatas han sido capaces de contagiar con el virus del punk. Gérmenes y Segismundo Toxicómano han conseguido gracias a su talento ganarse un sitio de honor en la música de nuestro país, pero con la salida de sus nuevos discos podemos presenciar como cada banda se torna en cada cara de una misma moneda.  Si pusiéramos en una gráfica la evolución musical de ambos podríamos apreciar claramente como se van separando siguiendo caminos muy diferentes. Mientras que los andaluces empezaron poniendo el listón muy alto con sus primeros 3 discos, los vascos han necesitado más trabajo para conseguir el reconocimiento que se merecen y que ahora hace que sus actuaciones en los grandes festivales de nuestra nación estén atestados de gente deseosas de disfrutar de sus impactantes directos. Tras casi 15 años de existencia Segismundo Toxicómano ha sido capaz de encontrar ese sonido que les definiera a la perfección con este Ke no cunda el pánico, pero siempre sin renunciar a sus raíces del rock radical vasco y el punk ingés del 77. Con cada disco que han ido publicando hemos sentido en nuestras entrañas como sacaban a relucir todo ese odio que llevamos dentro y que, a fin de que no estallemos cual bomba, debemos sacar al exterior. Letras cargadas de rabia contra todos aquellos que nos hacen ser peores personas, acompañadas con una furiosas guitarras que demuestran el grado de implicación que tienen con todo aquello en lo que creen. Y todo ello sin rodeos, ya que las cosas son mucho más fáciles de comprender mientras más claro te lo dicen. En cambio el caso de los sevillanos es precisamente al contrario. Desde un principio se les notó la calidad que tenían, llegando al apogeo con su disco Tragando sin escupir, que se ha convertido en uno de los trabajos más completos del punk rock de nuestro país. Apadrinados por Reincidentes, una repentina separación nos dejó con la intriga de hasta dónde podrían haber llegado estos chicos. Tras casi 8 años sin noticias, una sorprendente reunión para tocar en el festival Aupa Lumbreiras les demostró que la gente tenía ganas de tenerlos de vuelta. Y con esas llegamos a este 2011 en el que nos presentan su vuelta, con un título clarificador Nos Levantamos. Quizás puede que precisamente las altas expectativas por su vuelta sea su peor enemigo, ya que el disco no nos ofrece todo lo que podríamos esperar. Escuchamos a unos Gérmenes edulcorados que en nada se parecen a aquellos que nos sorprendieron con sus incendiarias...

Leer más
-
-
Ir a la barra de herramientas