Las Führers. Apoteosis del mongoloide y las estridencias cromáticas
Bajo el apelativo Las Führers todo hijo del vecino daría por hecho de que nos encontramos ante un conjunto integrado por mujeres, en este caso líderes absolutas a la par que autoritarias. Nada más alejado de la realidad. Las Führers es un grupo punk -macarrónico y desquiciado-formado por seres con cromosoma XY. Tras un concienzudo análisis de su lírica, los Drs. Jabato y Trans podemos afirmar que manifiestan un patrón de sumisión a diferentes niveles. En sus declaraciones, amén de lo que se chismorrea en los foros de dios, salen por la tangente constatando que lo suyo es la más pura provocación mongoloide. Desde nuestro consultorio continuamos investigando para esclarecer este embrollo. Como hemos podido observar en varios análisis de comportamiento, los dictadores y los regímenes totalitarios consecuentes han sido un blanco muy atractivo para cumplir el propósito de provocar jocosamente desde la escena punk. El tiempo ha pasado, cicatrizando las heridas, para ceder un amplio espacio para la frivolización y el cachondeo. Muchos son los grupos que toman los nombres más conflictivos para bañarlos en humor negro y ácido. Las Führers retoman el espíritu más alocado del punk ochentero, bajo su autoapelativo de aznarkopunks que hacen tecno-punk-bakalao. Cuando se realice su ingreso en un centro curativo será imprescindible mantenerlos alejados de otros grupos que no formen parte de la escena punk amateur pride; heredera del legado de grupos como Siniestro Total, La Banda Trapera del Río o Toreros after olé. Si no se siguen a rajatabla las instrucciones pertinentes se generarán múltiples conflictos derivados de su afición al punk de melodías rasposas, acompañado por un desafinado casiotone. Con lo relatado pudiera parecer que dicho aislamiento es innecesario, pero si le añadimos un plus de incorrección política, el tratamiento está más que cantado. Con una media de minuto y medio por tema derrochan una brillante provocación. Para más información pueden recurrir a su maqueta Experimento nuclear y al disco El futuro no nos necesita. Existen también varias recopilaciones documentadas que acogen sus aberraciones...
Enero 2012 | Selección ‘Vídeos del mes’
Enero 2012 – Vídeos del Mes en El Musiquiátrico Dementes míticos: La Banda Trapera del Río – ‘Nos gusta cagarnos en la sociedad’ Más sobre La Banda Trapera del Rïo en El Musiquiátrico Nuevas tendencias: Kase-O Jazz Magnetism – ‘Boogaloo’ Más sobre Kase-O Jazz Magnetism en El Musiquiátrico En la celda acolchada: Cigo (One Man Band) Más sobre Cigo, One Man Band, en El...
La Banda Trapera del Río a tumba abierta
Los hagiógrafos del punk ibérico consideraron siempre que grupos vascos como La Polla Records o Eskorbuto fueron los pioneros del punk en España. Sin embargo, un necesario ejercicio de memoria under nos llevará a señalar inexcusablemente que la primera referencia punk en ésta nuestra piel de toro proviene de la apestosa cuenca del Llobregat y corre a cargo de La Banda Trapera del Río, seminal combo de ruidismo y rabia lumpenproletaria. Corría el año 1979 en ‘ExPain’, el dictador apenas llevaba cuatro años muerto, la sacrosanta Constitución era aún un proyecto de puta berreante y el PNV no se había sacado todavía de la chistera el repugnante y falso apelativo del RRV (Rock Radical Vasco para los de la LOGSE). Más allá de Jarcha y de otros cansautores recientemente legalizados, encontramos una generación con ganas de expresarse más allá del formato radiofórmula que el franquismo había permitido y -después- potenciado como producto de consumo masivo. El debut homónimo de la Trapera contiene trallazos como ‘Venid a las cloacas’, ‘La regla’ (ya incluida en un single previo), ‘Curriqui de Barrio’ o ‘Nacido del polvo de un borracho y del coño de una puta’. Ángel Casas, en el programa Musical Exprés de La 2, los definió elocuentemente “como una pelea callejera, como una bronca de discoteca suburbial, como un vómito tras una noche de mal rollo”. Desde entonces ha llovido mucho, o lo suficiente, como para que la Trapera viera cómo morían varios de sus componentes (el Tío Modes en 2004 y Rafi Pulido en 2010), cómo se reeditaban gracias a Munster algunos de sus discos, y cómo, en la enésima vuelta de tuerca, los traperos supervivientes se unían para llevar a cabo una gira nacional que fue finalmente abortada. Aparecieron, en este ambiente de renacimiento trapero, el libro biográfico ‘Escupidos de la boca de Dios’ (Jaime Gonzalo, 2007) y el documental ‘Venid a las cloacas: Historia de la Banda Trapera del Río’ (Daniel Arasanz, 2010). En 2011, Morfi Grey, la voz trapera de siempre, se unió al ecléctico grupo Electroputas, con el que registra un disco de difícil asimilación titulado ‘Cielos...
