Canciones que nunca se escucharían en Zarzuela
La situación en la Casa Real de España es algo delicada en estos tiempos de cambio, y entre «rojos» y «morados», y «cánticos del populacho», la Familia Real debe ser protegida de factores externos que puedan perturbar su pomposa armonía y delicada salud. Una de las primeras medidas radicales que se han implantado como obligatorias ha sido la «Toma de la Pastilla», nada que ver con el suceso ocurrido en Francia, más bien con lo fabricado en Alemania. Entre otras medidas encontramos la censura al hilo musical del Palacio de la Zarzuela, que ha sido estrictamente moderado, probablemente por la batuta de algún barroco que aún habitará entre la realeza. Os dejamos algunos de los temas prohibidos que nunca se escucharán en Zarzuela. El primero, menuda perla. ¿Cómo se les puede ocurrir a estos de Engendro recordarle al Rey que ya no sale en los billetes? Y si sólo fuera eso… ` La melancolía tampoco es asignatura en la Zarzuela, y todo lo que recuerde a pasado no será bienvenido, especialmente lo de «el otro pasado»… La Casa Real debe ser ejemplo de muchas cosas, pero explicar el término «Feo» no entra dentro de sus competencias. Aún así, La Polla Records les dedica un poco de semántica que jamás llegarían a comprender, sobre todo, porque no lo escucharán. Si por joyas prohibidas en Palacio se tratase, nuestro amigo Kabezabolo, estandarte musiquiátrico, no podía quedarse sin su atribución. Se conoce que un soldado de la Guardia Real fue sorprendido tarareando la canción «El Rey» de Manolo, y nunca se supo más de él. Si antes del huevo está la gallina (lo del debate del aborto lo dejamos para otra, Manolo), antes del Engendro, ¿Qué hay? Pues resulta que una enorme, amorfa y suculenta ladilla. Y cómo no, la Mamá Ladilla también tiene su mensaje musicopático en la lista negra de la Zarzuela. Pero por supuesto, si hay una melodía, unas tonadas, que nunca sonarán bajo ningún concepto en el Palacio Real, mientras el Rey sea Rey, y el hijo, Rey también, será la famosa creación del compositor Juan Carlos Cuello. Por ahí no pasarán… ¡Seguro! Ahora te toca a ti… ¿Eres monárquico? ¿Eres republicano? ¿Eres un musicópata y punto? Pues comparte la canción que colarías en el hilo musical de Zarzuela y déjanos tu RESPETUOSA...
Puto Punk Vol.2
Y aquí SLAUGHTER & THE DOGS (algo así como Carnicería & los Perros), seminal banda inglesa de punk (y un poquito de rock and roll, pero poquito) que daba tralla por aquellos mitificados -sin razón- años setenta… But a bottle in your face!!...
Puto Punk Vol.1
Hoy llegan, vertidos directamente al sucio cajón musicópata, los enfermizos SUDOR, joven trío toledano de puro raka raka....
Cruzando el Charco… Peso Neto
Hoy en Cruzando el Charco, para acabar la semana con algo más de fuerza, nos desplazaremos a Colombia para presentaros a Peso Neto. Esta banda de Rock Alternativo y Punk nacida en Bogotá el 24 de Febreo del 2000 está formada por Josué Martínez en el Bajo, Enoc Pacheco en la guitarra y voz líder, y su hermano Samuel Pacheco en la batería, quienes conocían desde la adolescencia al bajista y tras formar una buena amistad y descubrir sus mismos gustos musicales, decidieron formar la banda. Tras el duro trabajo de formar una banda y las interminables horas de ensayo, grabaron su primer disco en el estudio Move Studios (Bogotá), llevando el mismo nombre que la banda y compuesto por doce temas y una presentación multimedia. Disco completamente personal, donde unieron las vivencias de Josué y los hermanos Pacheco, debatiendo en el trabajo los diferentes problemas cotidianos. En la actualidad están preparando su segundo trabajo. A Peso Neto le preocupa observar a la juventud que está en las drogas, en los vicios, la violencia; es por esto que a través de sus canciones transmiten mensajes que los llevan a la reflexión y les permiten conocer a Jesús. Como presentación os dejo el videoclip del tema Brinca. ...
Lunachicks, las reinas del scumrock
Lunachicks fue una banda de mujeres neoyorquinas, nacida en 1987 y fallecida el año 2000, aproximadamente. Pese a mantener una actitud muy punk su música es de difícil catalogación y en ocasiones ha sido descrita como una frenética mezcla de punk, metal, pop y rock. Una razonable y desordenada amalgama derivada de los sonidos ramonianos, y de otros grupos como Kiss y MC5. Salvajes constructoras de su propio underground, divertidas performers, sus actuaciones no dejaban al público indiferente. Sobretodo considerando que contaban con Theo Kogan como vocalista, cuya rompedora apariencia en escena consistía en zapatos de plataforma, vestidos ultracortos, maquillaje surreal a lo Nina Hagen y grandiosas pelucas. Aunque Theo no era la única que se disfrazaba, todas las demás se ataviaban con lo primero que pillaran: desde vestimenta estampada a modo de piel de serpiente, hasta el vestuario prototípico de las amas de casa de la época; desde uniformes de fútbol, hasta pijamas de horteras. De algún modo las L-Chicks fueron incluidas en el fenómeno marketing Riot Grrrl. Estaban altamente politizadas, pero nunca consiguieron ni un diez por ciento de la atención que recibieron otros grupos encasillados en la misma ola. Quizás porque ellas tenían menos de estética grungera y hardcoreta: en sus canciones podían incluso recurrir ocasionalmente a efectos de guitarra, amén de que articulaban las palabras de modo que puedas ser entendidas. Su militancia iba también de la mano de la mención de las funciones excretoras y de los efectos colaterales de la misoginia hereditaria. Si nos remitimos, por ejemplo, a la portada del disco Pretty Ugly, podemos encontrar una cabeza de Barbie con parte de los intestinos desparramados y rodeada de insectos. Esta estética, que encontraremos también en otros álbumes, nos remite a las obras de la fotógrafa americana Cindy Sherman, en las cuales jugaba con explícitas muestras de excreciones. Participaron en recopilaciones y festivales relacionados con el movimiento SCUM, así como en el documental dedicado a las Riot-Grrrl titulado Not Bad For a Girl. Para más información al respecto nos remitimos al manifiesto homónimo firmado por Valerie Solanas. Su manifiesta línea -digamos- pro-queer, sembraría enfrentamientos en las instituciones de la industria musical. Los parámetros que emplearon escupían sin remedio contra el estereotipo que estaba preparado para ellas. Nada más alejado del modelo de muñeca adorable: Lunachicks eran cinco locas, intoxicadas en hierba, speed y copiosas cantidades de azúcar. ¿Qué pasó con las L-Chicks? La cantante Theo se casó con el guitarrista de Toilet Böys, con el que formaría Theo & the Skyscrapers; continuó haciendo cameos en el mundo de la moda y en el cinematográfico. Gina formó la banda rock Bantam, y Helen Destroy...
