Revista Digital MUCHO MUNDIAL, patrocinadora del 1er Recopilatorio Musiquiátrico

· Mucho Mundial será co-patrocinador oficial de la I Edición de los Recopilatorios Musiquiátricos En lo más profundo de los trastornos obsesivos de muchos musicópatas repartidos lo largo y ancho de este mundo, aficiones y pasiones como la música y el fútbol comparten cama en ese gran bunker lobulado que es el cerebro, que dispara hacia las extremidades todo tipo de sensaciones y delirios. En la complicada tarea de contagiar a nivel mundial las 30 cepas musicales que componen el 1er Recopilatorio Musiquiátrico, para esta edición tenemos el placer de contar con el patrocinio y la colaboración promocional de Mucho Mundial, revista digital internacional exclusiva de fútbol de selecciones, con miles de seguidores de España y de toda América Latina. Mucho Mundial abarca desde la historia más minuciosa y las curiosidades más insólitas del fútbol internacional, hasta la actualidad más relevante contada desde una perspectiva profesional y apasionada, y enriquecida por contenidos multimedia. “La Catedral Digital del Fútbol de Selecciones”, patrocinadora del 1er Recopilatorio Musiquiátrico. Contágiate del mejor fútbol internacional en...

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Aviador Dro y sus Obreros especializados: Futurismo o barbarie

· Servando Carballar y Aviador Dro, 35 años de tecno-surrealismo musical · La Voz de la Ciencia, nuevo proyecto de interconexión ACTS Si existe un grupo al que podamos denominar vanguardista (y por vanguardia entenderemos aquí el dadaísmo, el surrealismo, el futurismo y, finalmente, el punk) ése es sin duda Aviador Dro y sus Obreros Especializados, combo que toma su nombre en homenaje a la ópera del músico futurista Francesco Balilla Pratella. Surgidos en 1979, sus referentes musicales más rastreables son sin duda los primeros Kraftwerk -antes de que las hornadas de pijos modernísimos los redescubrieran como el origen de la música tecno- y los franceses Devo. Afirman ser «el primer paso hacia el hombre-máquina«, meten en una batidora de sintetizadores a Hegel y a Marx y dicen querer consumar la violencia estética. Ah… y llevan la friolera de casi 35 años dando tralla en salas y festivales de media España y Latinoamérica. Tras el Aviador encontramos la figura de Servando Carballar (a.k.a. Biovac N), fundador del grupo y único miembro que ha permanecido siempre en él. Ello no ha impedido al Aviador producir multitud de cojonudas canciones ultraístas, quizás de difícil asimilación y poco o nada susceptibles de entrar en la radio-fórmula. En los últimos años de la Guerra Fría y sus terrores nucleares, y cuando todo el underground ibérico se acoge a la consigna «Nuclear? No gracias», ellos lanzan el tema «Nuclear sí, por supuesto». En 1982, hartos de que la mercadotecnia discográfica se les meara sistemáticamente en la cara, se ven forzados a formar la discográfica (independiente en un principio) DRO, acrónimo de Discos Radiactivos Organizados, con la cual grabaron sus discos hasta 1990 y gracias a la cual la consabida Movida (aquel gran invento de Don -es un decir- Enrique Tierno Galván) cobró bastante impulso: grupos como Siniestro Total, Glutamato Ye-Yé, Gabinete Caligari, Loquillo, Los Nikis, Nacha Pop, Decibelios o Alphaville, y otros posteriores como La dama se esconde, Platero y tú o Dover, grabaron con Dro. Hasta los malditísimos Eskorbuto grabaron «El infierno es demasiado dulce» con la susodicha discográfica. En 2012, Aviador Dro lanza el trabajo multidisciplinar ‘La Voz de la Ciencia’, que incide en la interconexión entre ciencia, arte, tecnología y sociedad. Ellos sabrán lo quiere decir eso. O tal vez no....

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Revista ACORDES, mucho más que música sobre papel. Historia y disponibilidad multimedia para todo musicópata

Comunicado oficial de ’Acordes, La Revista’ para El Musiquiátrico: La historia de esta locura empieza en un lugar donde aprender era considerado una utopía: la universidad. Un humilde enseñante propuso a su clase la creación de varias publicaciones especializadas, y una alumna con nostalgia de un antiguo programa de radio convenció a su grupo para decantarse por la música alegando que política y economía eran temas muy aburridos. En Noviembre de 2008 vería la luz el primer número de Acordes, con sólo 12 páginas. Así, acabado el tiempo lectivo, el grupo que trabajaba junto a aquella alumna regresó a sus clases y dio por terminado el proyecto. Lo que nunca imaginaron, es que ella seguiría adelante con su locura y buscaría apoyo en colegas, artistas, compañeros y otros personajes que fue encontrando en su camino. Poco a poco, gracias al trabajo y las ganas de unos cuantos yonkis de la música, Acordes se redefine como un magazín musical multimedia que desde 2010 desarrolla síntomas claros de personalidad múltiple según el soporte: revista on-line en la librería de issuu o física en algunos eventos, blog, facebook, twitter, canal youtube , goear, netlog, neopromociones, etc. Acordes es sobre todo ilusión por un proyecto joven, revolucionario y creativo basado en el sincero amor por la música, por lo que la especialización no siempre se basa en un análisis del más sabio, sino del melómano, del que tiene una experiencia con melodías y ritmos, o sea, del que se deja llevar siempre que el volumen esté al máximo. Aunque seamos cuatro gatos locos con medios precarios, pues no tenemos subvenciones ni publicidad pagada, cada número se toma como un reto de superación en herramientas y contenidos hasta tener en la mano un resultado convincente. Queremos llegar al público de una forma más directa, con un formato original que ofrezca una comunicación multidireccional entre todo aquél que tenga algo que decir o una canción con la que disfrutar. Creemos que es posible dar información veraz por encima de intereses y amiguismos, pero jamás desaprovechamos a los colegas con talento. Y defendemos el derecho a recibir contenidos informativos y formativos, que den prioridad a su función didáctica sin presuponer que todo se sabe y absorbiendo las enseñanzas de las criaturas que comparten nuestro viaje musical. Hoy Acordes cuenta con 28 páginas a color más los contenidos del blog, y Facebook, que permiten un seguimiento habitual hasta que pueda salir un nuevo número; todo ello bajo una licencia Creative Commons. Y lo más importante, como dicen las abuelas eméritas: “Somos pocos pero bien avenidos” y encima con la gran suerte de habernos encontrado con personas y...

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