Grupo Sub-1 y su mongoloide provocación

  • Diagnosticados por pirómanos del dogma panfletario y por psicópatas de la provocación más deliberada

Grupo Sub-1Érase una vez, en el parafantástico territorio del underground madrileño, un grupo llamado Webeloss, aficionado a crear trallazos rápidos y furiosos, aficionado también a provocar en todas las trincheras, aún en las estipuladas como propias. Consiguieron, gracias a no pocos intentos, que muchos integrantes de la escena más politizada sufrieran infecciosos sarpullidos, consecuencia de sus reiteradas provocaciones.

Pero lo que nos convoca hoy no es Webeloss, sino Grupo Sub-1. Con toda probabilidad, afirmar que la existencia del Grupo Sub-1 es una continuación de Webeloss no parece exagerado, considerando que comparten tres componentes que, por así decirlo, habían sobrevivido a las cenizas del proyecto antiguo. Las comparaciones son odiosas, pero en este caso afirmamos que Grupo Sub-1 no es el resultado de la ecuación Webeloss + teclado. Se trata de algo más furioso, más sintético y más concienzudamente provocativo; sus venganzas se orquestan ahora con mayor detalle, cual incunables crímenes de un psicópata.

Lo suyo es lo mongoloide, amenizado por el sonido de un teclado que atraviesa todos los temas. La clave consiste en ensayar muy poco para no perder el espíritu y que todas las canciones parezcan improvisadas. Parámetros generales, según Spidey:

“Virtuosismo: 0. Descaro: 10. Voz masculina: Super nasal y muy aguda. Voz Femenina: Grave y fuerte. Canciones muy cortas. Bajo muy alto. Y por supuesto que suene a Punk 76-82, con guitarras muy agudas y con poca distorsión.”

En el mejor de los casos, sus grabaciones están agotadas porque su modus operandi habitual consiste en editar en formato vinilo. Todo el ambiente de sus canciones queda aromatizado por el tufillo de la era de los cutre-cassettes, que ellos mantienen -en cierto modo- editando en vinilo. Para más inri, Grupo sub-1 añaden esmerados suplementos a su música, como vinilos de colores o portadas ahora serigrafiadas, ahora en tres dimensiones -con gafas incluidas-. Webelos - Grupo Sub-1 - Cero en matemáticasLa diversión, y la sensación de sentirnos afortunados por tener sus discos en las manos, está más que asegurada.

Nos ofrecieron sus primeros temas dentro de una grabación conjunta con Webeloss, «Cero en matemáticas» (Blondes Must Die Records, 2006). A pesar de ser el estreno de Grupo Sub-1, constituye un trabajo amparado bajo la factura de Webeloss; por poner un ejemplo palpable, el primer tema «El nazi eres tú» es una respuesta del mencionado grupo a los problemas derivados por su afición a la provocación con imaginería y retórica nazis.

La auténtica presentación del proyecto llegaría con «Tercer Grado En Leningrado» (La Vida es un Mus, 2007), con la incorporación definitiva de She Lux a lomos del más delirante de los teclados. El resultado huele a Orwell por todos lados, a él y al retrofuturismo post-nuclear que otras tantas trataron, eso sí, lacado ahora también en antiguo Telón de Acero. Temas como «INSOC» o «Solar? No gracias» nos permirten establecer relaciones con Aviadro DRO y sus obreros especializados.

En 2009 brindan el EP titulado «Rebelde Wave» (La Vida es un Mus) con 3 temas propios y una versión de las Dishrags. Manteniendo una línea virulentamente futurista y provocadora, los Sub-1 fabrican aquí una medicina visionaria que tiene como ingredientes principales la flamante incorporación del Theremin en «Esto es Madrid» y los libros ardiendo a 451 Farenheit. De hecho, definen el Rebelde Wave así:

“Ray Bradbury y Harry Harrison desnudos, sangrando y muertos de frío en un aparcamiento subterráneo vacío justo antes de que el asesino enviado por el gobierno totalitario entre a matarles con una Mauser C96.”

En 2010 recopilaron todos sus trabajos anteriormente mencionados en formato CD. «Curso de 1984» (Rumble Records) se nos presenta con dos portadas intercambiables, que plagian – con mucho arte – el split de Kaka de Luxe vs Paraiso y los recopilatorios de DRO de Héroes de los 80, respectivamente.

El último presente que nos brindaron fue «Nuevos dioses» (P.Trash, 2011) que, sin renunciar a la parte wave, supone un desgarrado regreso a la visceralidad irreverente. Sus melodías continúan atrapando, como para que tarareemos hasta el fin de los tiempos, pero en cada aparición nos regalan un sonido más cuidado, aunque no por ello menos crudo. Ejemplo de ello serían temas incisivos hacia la progresía planfetaria, como «Quiero que vuelva la mili obligatoria» o «Es lo mismo».

Como no son de los que gustan de montar bolos, y menos todavía si se añaden las dificultades derivadas de salir de la capital de Is_Pain, os recomendamos que aprovechéis si tenéis ocasión de verlos en directo. ¡Que el fin llega pronto malditxs!

 

Author: Dra. Laura Trans

La Dra. Trans (Carcelona, 1986) cursó Parapsicología arqueológica en la Universidad de Yale, estudios que completaría con su tesis doctoral titulada Corrientes autodestructivas en el margen izquierdo del río Nervión. Expande sus pensamientos infectos de musicofrenia en su página poetisadifusa.blogspot.com y contribuye a la diseminación antilucrativa de la literatura underground con el proyecto Ediciones Caín'84.

Compártelo con todos

1 comentario

  1. Gracias, chavales. Veo que os llegaron los 500 euros, jeje.
    Por cierto, tocamos el 29 de junio (2012) en el rock palace (madrid) por si alguien se quiere pasar…

    Post a Reply

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

-
-
Ir a la barra de herramientas