El Sombrero del Abuelo | Flamencos macarreros divirtiéndose con la electrónica
Ago21

El Sombrero del Abuelo | Flamencos macarreros divirtiéndose con la electrónica

Sospechoso artilugio musicopático nos preocupa por su encendida autenticidad y nos obliga a reducir a sus autores con correas de intimidación en una de las peores celdas del Musiquiátrico por superpoblación y agresividad: la celda de los macarras que pretenden fusiones inverosímiles de flamenco y rock, de krautrock y rave, de juerga  y compromiso político-social. El proyectil envenenado y contagioso en cuestión es el nuevo y segundo trabajo de El Sombrero del Abuelo, titulado ‘DANGEROUS: peligro de abducción’. No es una creación excesivamente reciente, su fecha de publicación corresponde al año 2011. Sin embargo, su verdadero peligro radica en la fuerza y la verdad que irradia día tras día, o mejor dicho, noche tras noche, en cada concierto, colándose su cianuro sonoro por alcantarillas y cañerías de barrios y calles sin posibilidad de detección ninguna, llegando a ser masivamente inhalado, bebido y oído por, cada vez más, inocentes criaturillas musicoactivas. Intentamos establecer cuanto antes una zona delimitada de aislamiento, no prometemos nada. El Sombrero del Abuelo es una banda de bandarras, una trifulca de soñadores tarados apostando a ver quién da más, a ver quién aporta y aprende más de los demás bandarras (advertimos de antemano que Bandarra fue un poeta del siglo XVI, considerado un profeta moderno que manejaba a la perfección versos de encendido mesianismo). Viven en la constante interacción de músicos entre sí, participando de interminables colaboraciones entre grupos y bandas de idénticas inquietudes y psicosis sonoras. Así resulta que El Sombrero del Abuelo comenzó a gestarse en 2002 con Raúl Del Amo (letras, guitarras y voz), Antonio Del Amo (bajo) y Alex García (secuencias). Cuatro años más tarde, jarra arriba o abajo, aparecen en escena Juancho Martínez en la percusión y Danilo Montoya con la flauta, ambos de Canteca de Macao. Será después cuando se apunten al sarao cuatro personajes más: Rodrigo Núñez(charango y percusión), Víctor Guadiana(guitarra eléctrica y violín), Luis Neyra(flauta) y Demetrio de Ces(secuencias). De esta manera se implantó con cierta madurez el tratamiento psicoacústico de relativa agresividad que se dio a conocer, bolo tras bolo, como El Sombrero del Abuelo. Con esta alineación inicial se llegó a la consolidación de su peculiar tecnocopla de imposibles mezclas. Su primer disco ‘Sístole y Diástole’(2007), producido por Rodrigo Núñez y masterizado por Guillermo Quero, fue autoeditado y transpiraba intimismo y sonidos de ascendencia hippie pero bastante aflamencados con cierto buen rollo y mucha calma. Pero la clave de la esencia psicovírica y musical de El Sombrero del Abuelo, aparece para quedarse a partir del año 2009 en que ponen en práctica el concepto visual definitivo para su tipificación clínica en nuestro centro terapéutico. Las proyecciones...

Leer más
París Combo, delirios atemporales del Cabaret
Ago17

París Combo, delirios atemporales del Cabaret

París Combo, el quinteto intercontinental de largo recorrido (en grupo y por separado) anuncia su regreso para este año 2012 con gira y nuevo disco. Estos antiguos miembros de la resistencia musicopática francesa (que no hacen más que alentar las retrovisiones infecciosas de la esencia, la cultura, el arte, las escenas, los aromas y la música del mejor París nostálgico pero trepidante, romántico pero bastante loco de los años previos a la segunda guerra mundial), tras poner en práctica sus arriesgados proyectos en paralelo, vuelven al dispensario del “París Combo” como lo que han sido desde 1995: doctores en mezcolanzas inherentes al origen y la procedencia cultural y geográfica de cada uno de sus miembros, terapeutas sonoros desde el Jazz y la World Music al extranjero musicario, embaucadores de visiones circenses con espectáculos de calle para engañar a tus sentidos haciéndote creer en los cabarets y el disloque del blanco y negro. Todos los continentes y todas las propuestas integradas con soltura en un mismo combo frenopático de sabia escuela y tremendos shows. Habrá que tener precauciones musiquiátricas en la búsqueda de tratamiento para que la elegancia mestiza no ocasione demasiadas bajas. Hace ya casi dieciocho mayos franceses que cinco soñadores, a la vez que perros de circo global ya experimentados, sumaron personalidades musicales y conjuraron pócimas de ultramar para concebir un proyecto de orquesta a la antigua usanza; de las de Swing, Jazz, Foxtrot y otras vilipendiosas reacciones epidérmicas que te obligan a bailar junto al altavoz, o mejor dicho, junto al combo de locos músicos que en formato de tres o más pases te contagian la euforia colectiva del escenario, la energía y la danza vesánica de las salas y locales nocturnos más genuinos, noche tras noche. Para ello, no hubo jamás condición previa de formar parte de estos ambientes ni tocar cacharrería propia de aquellas bandas. Cada cual venía de donde venía y tocaba lo que le apetecía o sabía. Así Belle du Berry se adueñó del micro para poner voz a semejante espectáculo patológico de ferviente sonoridad, además de prescribir acordeón de prisas y alegrías para ser sobre todo la cara simpática y atrevida de la formación. Es curioso saber que en sus inicios, se soltó musicalmente en bandas Punk-Rock. Potzi hizo acopio de las guitarras y look reinhardt siendo un iluminado musicópata de origen argelino y orate licenciado en músicas árabes y acordes gitanos. Jean-Francois Jeannin agarró desde pequeño unos palos y no tuvo jamás intenciones de soltarlos, haciendo tiempo atrás buenas recetas funkarras y de música electrónica. El pianista australiano David Lewis era conocido ya en la música sudafricana y claro, como no...

Leer más
Chico Science e Naçao Zumbi | Cangrejos con cerebro de Recife y Mangue Beat
Ago15

Chico Science e Naçao Zumbi | Cangrejos con cerebro de Recife y Mangue Beat

La ciudad de Recife al noreste de Pernambuco vio crecer a Francisco de Assis França, entre el manglar y las lagunas, sobreviviendo gracias a los cangrejos que mariscaba en los contaminados rios que pasan cerca de la antaño capital brasileña. Ese niño, que más tarde sería conocido como Chico Science, se convirtió en uno de los iconos de la cultura y la música de su país, antes de morir en un accidente de tráfico en 1997. La historia de Chico Science no se puede entender sin conocer el movimiento musical y cultural que se desarrolló a su alrededor, conocido como Mangue Beat. El movimiento se formó tras un manifiesto de Fred Zero Quatro, vocalista de Mundo Livre S.A, titulado «Caranguejos com cérebro». En este manifiesto se define el mangue como uno de los ecosistemas más ricos en flora y fauna del planeta, y por tanto, reclamaban para los habitantes del manglar una cultura igual de florida y diversificada. Esto definió el estilo del Mangue Beat, que curioseaba en todo lo que se ponía a su alcance, rock, hip hop, funk y música electrónica se fusionaban con el maracatú, la música que habían tocado los ancestros brasileños antes de la colonización de los holandeses y los portugueses. Llevando como icono una parabólica clavada en el lodo, el manifiesto de los «Caranguejos com cérebro» terminaba con el siguiente párrafo: Los mangueboys y las manguegirls son individuos interesados en el cómic, la TV interactiva, la anti-psiquiatría, en Bezerra da Silva, el  Hip Hop, los medios, el arte, la música callejera, John Coltrane, la casualidad, el sexo no virtual, los conflictos étnicos y todos los avances de la química aplicada al terreno de la alteración y expansión de la conciencia. Su intencionalidad era clara, y no era otra que sacar a Recife de la crisis social y cultural en la que se encontraba sumida, llegando a ser declarada en 1990 la cuarta peor ciudad del mundo para vivir por el Population Crisis Commitee Institut de Washington. Desde el mismo día de la publicación del manifiesto, la prensa local se hizo eco del movimiento y apoyó la causa, que poco a poco se fue convirtiendo en uno de los movimientos más significativos de Brasil. Chico Science e Naçao Zumbi (CSNZ) nació a partir de la unión de Loustal, una banda de Punk-Rock en la que Chico era el vocalista con el grupo de samba y reggae Lamento Negro.  Las guitarras eléctricas se fusionaron con el Birimbao, y la lírica rapera con los ritmos afrobrasileños del Maracatú y los compases carnavaleros del Frevo. El primer disco de CSNZ salió a la luz en 1994 con el...

Leer más
CED – Companyia Eléctrica Dharma: sus satánicas majestades del Rock catalán
Ago14

CED – Companyia Eléctrica Dharma: sus satánicas majestades del Rock catalán

Esta legendaria formación musicomunal de reivindicación, celebración, inconformismo y baile, llevan 22 discos y 36 años como institución del Rock progresivo español y semilla polinizadora y contagiosa del Rock catalán. Musiquiatras de todo el mundo han tratado de analizar los sueros patológicos que activan constantemente a esta banda en su vitalidad de Jazz-fusión, de Rock sinfónico, de Folk Rock, de Folk catalán, donde la presencia de saxo soprano es elevada y donde se desconoce el gen que los inmuniza contra el paso del tiempo y los dota de longevidad musicopática al estilo de Mick Jagger, Keith Richard, Ron Wood y Charlie Watts. En el Musiquiátrico tenemos el placer de alojar en celda compartida a sus satánicas y catalanas majestades, Companyia Eléctrica Dharma, para estudiar en profundidad su febril y apasionada entrega rockera en clave nacionalista y alegre, tras su evidente pacto con el diablo. Usaremos el manual previsto para estos casos: el “Robert Johnson experience”. Procedentes del barrio de Sants (Barcelona), su origen musical y filosófico se localiza en mitad de una comuna rural cercana a Gerona en el verano de 1974. Jordi Soley formaba parte por aquel entonces del tabernáculo CED ( Compañía Eléctrica Dharma), aunque es lógico pensar que un comborock de esta tremenda perennidad vital haya sufrido algunas bajas y altas en su formación original. Hablamos fundamentalmente de siete componentes musicofísicos además de la energía, la luz y el karma de un miembro muy especial, su guitarrista original Esteve Fortuny (fallecido en el 86). Joan Fortuny (voz y saxo), Josep Fortuny (batería, percusiones y voz), Lluis Fortuny (trompeta, acordeón, teclados y coros), María Fortuny (teclado, pianos y coros), Carles Vidal (bajo), Pep Rius (guitarra eléctrica) y Tianan Bi Tra (djembé). Esta multifamiliar orquesta de rock mediterráneo ha sabido abanderar con vehemencia una música de carácter festivo, conjugando severamente Folk catalán, sobre todo la Cobla (al Pirineo catalán y la lengua de Oc lo que la copla al castellano) y sus característicos oboes; con la World Music, el Jazz y el Rock. Todo ello en un espontáneo batiburrillo de efectiva sonoridad donde el espectáculo callejero, el rock de himnos tabernarios y la tradición de los pueblos y fiestas de Cataluña, supuran energía por los cuatro costados de la geografía ibérica contagiando masivamente la euforia de los grandes eventos musicopáticos en directo. En la práctica crearon un sonido y un estilo inéditos con instrumentos rockeros al servicio de las raíces de la Música Catalana y un inconfundible saxo soprano (y personalísimos oboes) que entraña más dificultad en su ejecución que el resto de saxofones. No obstante, Joan Fortuny hace uso del mismo como si de Sidney Bechet, o...

Leer más
Yul Ballesteros: Entrevistas desde mi Isla
Ago08

Yul Ballesteros: Entrevistas desde mi Isla

Nacido en las Islas Canarias, formado musicalmente en Boston y Nueva York y afincado en Madrid, Yul Ballesteros ha conocido el Jazz a ambos lados del océano. Licenciado Suma Cum Laude por la Berklee College of Music, ha bebido de la influencia de los grandes del Jazz, como Pat Metheny, Marcus Miller o Rosenwinkel. Su guitarra entiende el Jazz en todos sus sentidos, ya que se desenvuelve igual de bien en una Big Band como en un dúo o un cuarteto y por eso empieza a acumular una larga lista de discos en los que ha colaborado de una u otra manera, además de dos geniales discos de Jazz y uno de versiones junto al timplista Germán López titulado «Something Stupid«. Su perfil encaja perfectamente con el de los más peligrosos musicópatas, por eso en el Musiquiátrico estamos encantados de haber podido realizarle este interrogatorio a Yul Ballesteros. Entrevista a Yul Ballesteros ¿Cómo es la vida de un músico de Jazz en España? Es como la vida de cualquier músico, creo yo, un poco más difícil porque tenemos menos mercado. Pero con la crisis, hoy en día todos estamos fatal. Realmente no cambia mucho, aparte de que la crisis ha afectado más a los que no son de Jazz, porque nosotros antes teníamos poco trabajo y ahora seguimos teniendo el mismo. No hay grandes giras, no hay grandes recortes. Hay recortes, pero claro, no hay grandes recortes en relación a lo que le han hecho a otros estilos, como los músicos de sesión, o la gente del Pop. Es duro, porque aunque en España ser músico no es una profesión que esté para nada mal vista, no es como en América. Allí es una profesión con una licenciatura como la de un médico, aquí la mayoría de los músicos somos “artistas entre comillas”, y sin ser despectivos, somos gente que nos dedicamos a vivir bien y a tocar, y eso es lo que piensa mucha gente. Pero ya cada vez menos, cada vez hay más respeto por los músicos y por la música en general. ¿Qué diferencias encuentras entre la música en España y la música en Estados Unidos? A nivel musical en Estados Unidos hay muchas más cosas pasando, hay más músicos y hay más competitividad, y es muy sana. Hay muchas perspectivas de hacer cosas, y hay muchas ganas. En Madrid también hay muchas cosas interesantes, por supuesto, en Madrid hay cada vez más músicos de Jazz y de estilos creativos, World Music o Fusión y aparte la calidad de vida en Madrid es mucho mejor. Hecho de menos cosas, pero voy a menudo a trabajar, por...

Leer más
-
-
Ir a la barra de herramientas